En los días muy soleados, y sobre todo al mediodía, me pongo gafas de sol y sombrero. Quizás podría arreglarme solo con las gafas o solo con el sombrero… Pero me pongo las dos cosas para estar más protegida, (y dar un toque de glamur, claro).
Con los complementos indirectos pasa lo mismo, podemos poner dos, un sintagma nominal y un pronombre personal átono que lo refuerza. Y hay que tener en cuenta que ambos tienen el mismo referente, es decir, señalan lo mismo, por lo que tienen que concordar, (los dos en plural o los dos en singular).
¿Y a dónde quiero llegar con esto? Este barco, mis aprendices, tiene dos objetivos, (y sigo con las metáforas, que me encantan). Por un lado, me dirijo al puerto llamado hacer bien el análisis sintáctico, y por otro al destino hablar correctamente.
Puntualizo esto porque es muy frecuente encontrar oraciones de este tipo, que son totalmente incorrectas:
Así que tened cuidado con el sol y con el pronombre que acompaña al complemento indirecto, que tiene que concordar con él.